Sociedad de espectáculo: Influencers

El tema de esta semana “Sociedad del espectáculo” me llevó a pensar en la actualidad, en como nuestras vidas giran alrededor de lo que hace otra persona de un rango social superior, y como nosotros tratamos de imitarlo, intentando escalar posiciones y crearnos una “reputación”. ¿Qué tiene que ver esto con la sociedad del espectáculo? Bien, Manuel Valls Gorina (1970) define la palabra “espectáculo” como:

Las actividades del hombre -- artísticas o no - que se manifiestan a través del complejo denominado «espectáculo» han surgido y se han desarrollado en función de un elemento ajeno a su sustantividad. Este elemento externo es el público.

Según en mi entendimiento, un espectáculo puede ser toda manifestación artística o no la cual tenga un público, es decir, ¿una persona, por ejemplo, que sube fotos a una red social como es Instagram, y tiene seguidores o followers llega a ser un espectáculo? Según Adrián Padrier Sebastián hacen falta una serie de rasgos definitorios de este concepto:

«1) Proponer un proceso de expectación y, en ese sentido, la adopción de una actitud acorde a la propia expectación.

2) Ser ostensible hasta el punto de que la propuesta se diseñe optimizando los beneficios de una recepción basada, fundamentalmente, en la ostensión.

3) Durar un tiempo que es el mismo tanto para el propio desarrollo del espectáculo, como para los espectadores.

4) Influir sobre el ánimo de los espectadores, al tiempo que verse influido por la respuesta del auditorio.

5) Abrir sendos lugares de ejecución y de expectación. »

Suponiendo que el ejemplo dado mío anterior si cumpla estos requisitos, ser influencer o «una persona que cuenta con cierta credibilidad sobre un temaconcreto, y por su presencia e influencia en redes sociales puede llegar aconvertirse en un prescriptor interesante para una marca » sería ser un espectáculo en sí. 

Ejemplificándolo como dice Manuel Valls Gorina: «De faltar este acompañamiento, tales actividades se dirigirían a la nada, al vacío, perderían su razón de ser. El público es para ellas el frontón imprescindible en que rebotan las resonancias vivificadoras de su propia esencia.» las influencers al perder su público perderían su razón de ser: 

 

Celia Fuentes una influencer que se suicidó con 27 años de edad, llegó a simular un photocall con flashes para evidenciar en la red social que era una persona demandada  Estába pendiente de la hora ideal para conseguir más likes. Estaba obsesionada con ello. Escenifica una vida de color de rosa y de amistades perfectas cuando en el fondo estaba vacía. Sola. Se dedicaba a retransmitir su vida a través de Instagram para lograr más followers, más me gustas y así conseguir subir su caché

Celia Fuentes recuerda al capítulo de Black Mirror:Nosedive (Episodio1 Temporada3) Una vida futurista en el que las personas son puntuadas entre ellas y según los likes que reciben escalan en la posición social. 

Aquí dejo un análisis muy interesante del capítulo. 

Suena surrealista este mundo, pero estuvo a punto de llevarse a cabo.